La Soledad

El que siga mi blog o que ya me conozca personalmente, sabe que no soy un hombre religioso, y menos todavía me atrae toda la parafernalia de la Iglesia católica; no dejo de reconocer que dentro de esa Iglesia hay mucha gente buena, preocupada por hacer el bien a los demás, pero lamentablemente son eclipsados por otros muchos que dan un pésimo ejemplo, empezando por sus gerifaltes, los obispos. Como ejemplo y aunque no es el tema que hoy voy a tratar no os perdais la noticia de Público "Miles de menores sufrieron abusos de sacerdotes, según el arzobispo de Dublín": para leerlo, pinchad AQUÍ.

Pero repito, no es denuncia ni crítica lo que hoy me mueve hacia la Iglesia católica, sino constatar la buena fe de una gente que de verdad cree en sus imágenes y las veneran y las sacan de procesión estos días. No os equivoquéis, a mi no me gustan las procesiones. Pero debo entender que a mucha gente sí y que lo hacen con una devoción que, en contra de otras actititudes de la Iglesia, en principio no traen nada malo (excepto atascos por las calles cortadas).

Viene todo esto a cuento de que Mariano, mi marido, es camarero de la Virgen de la Soledad de su pueblo, Villanueva del Río Segura, y que hace muchos, muchos años que la prepara para salir tal día como hoy, Viernes Santo. El miércoles por la tarde marchamos al pueblo y ayudó a vestirla y ayer hizo lo que mejor sabe hacer, decorarla con flores. Hay que reconocer que es una talla bien hecha, una cara dulce y guapa y en fin, os paso unas fotografías para que veais tanto a la Virgen como el trabajo floral realizado por Mariano, que es un artista.